Por el mar corren las liebres....

...♪ por el monte las sardinas ♪. Aunque como en este caso, no sea todo orégano.

Me explico.

Tras la consecución de la Liga por parte del F.C. Barcelona, el año del Madrid se volvía a cerrar, valga la redundancia cromática, en blanco. Algo con lo que -presumo- no contaban ni Florentino ni la afición, siendo que ambos habían puesto tanta ilusión -y dinero- en este nuevo proyecto.

Quedémonos con este concepto: PROYECTO. Más que nada porque me temo que va a ser el leit-motiv de la entrada que nos ocupa. Cada vez que la leáis, quiero que la imaginéis pronunciada por la majestuosa voz de Constantino Romero, como cuando dice 'Filmax, presenta:', con eco y todo.

Pues bien. Al final, ni copa del Rey (Alcorconazo), ni Champions (Lyonazo) ni Liga (Batacazo, fade out). Y no será porque no se ha puesto empeño. Se han fichado jugadores de calidad y sobre todo, de caché: Cristiano Ronaldo, Kaká, Benzemá; se han recuperado dos canteranos: Arbeloa y Granero; se ha puesto cerebro -en teoría, aunque yo discrepo de ello- al centro del campo: Xabi Alonso. Y se fichó a un entrenador con sobrada experiencia y reputación para conjuntarlo todo: Pellegrini.

Vale que éste último no era la prioridad a tener en el banquillo, por todos es sabido que antes que él había unos 4 más en los cuales Floren tenía más confianza para dar el mando de su galaxia: Ancelotti, Benítez, Mourinho, Wenger...y no nos extrañe que alguno más. Pero bien, tras la negativa de todos ellos, al final Valdano convence al sr. Pérez para que ponga al frente del equipo a don Manuel. Cabe decir que el magnate español no está convencido ni-de-coña, de ahí la amenaza al directivo argentino: 'como la cosa salga mal, te tendrás que sentar TÚ en el banquillo'. Y no se ha cumplido. Vamos, a menos que fuera en el de los acusados, no sea que Floren le acabe llevando a los Tribunales por hundirlo a él y al club precipitadamente en la mierda. No creo, pero tampoco lo descarto.

Sea como fuere, la cosa no termina de salir bien; pese al récord de puntos, goles y victorias en casa, la Liga se escurre en vida, como se escurren las manos de san Íker entre las curvas de su amada Carbonero a la luz del día. Así que, donde dije digo, digo Diego, y donde dije Proyecto a Largo Plazo, acabo diciendo Año de Transición.

Vamos a ver, que ya desde aquél lejano 10 de Noviembre (Alcorconazo) del año pasado se quería echar a Pellegrini del club (y casi-casi del país). Véase la portada de Marca de entonces, 'Manolo Vete Ya', con ese magnánimo subtítulo digno de cómic de Editorial Bruguera: 'Y encima se pone farruco: "no pienso irme hoy, ni mañana...ni pasado'. Al final las aguas volvieron a su cauce -parcialmente-, y pese a las nunca cesantes críticas hacia el técnico chileno, se decide que permanezca en el club. Cuatro meses después, la historia se repite. El Madrid se encuentra metido en un bucle espacio-futbolístico-temporal donde cada día es el día de la Marmota, sobre todo en referencia a la Champions y la caída de esta competición en octavos. Lyonazo to the max. Y otra vez, portada al canto. Por lo visto Nostradamus debió encontrarse ocioso el día que decidió vaticinar la temporada del Madrid 2009-2010, porque como si de una profecía se tratara, la Liga se les escapa por los pelos sólo 6 días después del ya mítico y repetitivo '10 de' (y de encomendarse a su nueva deidad Javier Clemente) . Y efectivamente, el día 17 la sentencia es clara -por si no lo había sido ya-: 'ESTÁS DESPEDIDO MANOLO'. Y es que lo -quizá- más doloroso de todo es cómo se escapó el título: tirando la toalla. El empate en Málaga es el detonante final para cortarle la cabeza a Pellegrini y echarla a los gorrinos, para que se entretengan un rato.

Lo que viene siendo la crónica de una muerte anunciada, vaya.

Todo esto era mega-previsible -bajo mi punto de vista, claro- ya desde el momento en que Manuel tenía las manos atadas a la espalda con un nudo marinero en plan bondage a la hora de hacer las alineaciones. Era de esperar que la cosa no terminara del todo bien; los tiras y aflojas de sentar a Benzemá, el nuevo delfín fichado por Floren para reflotar al equipo, en beneficio de sacar a Higuaín, fichaje de la anterior etapa presidencial (el cual, dicho sea de paso, cumple Y DE QUÉ MANERA con sus tareas ofensivas), unido al mal resultado del conjunto (que a veces parece que es imposible de encajar y del cuál siempre acaba tirando del carro Cristiano) van mermando la confianza que se tenía en el coacher hasta que la situación se hace insostenible. Hasta aquí, esto le podría pasar a cualquiera.

Lo que ya me parece más esperpéntico, surreal y carente de ese señorío del que el Real Madrid hace gala en todos y cada uno de los pasos que da, es el hecho de despedir de ese modo a Pellegrini y, sobre todo, de contactar con Mourinho. Y no, no me refiero a que éste último tuviera contrato aún con el Inter y tal y cual (eso es normal en este mundillo), NO. Me refiero a contactar con un tipo que está a la expectativa de ganar una Champions con su actual equipo, y de rebote, conseguir un Triplete. Y es que el ansia resultadista de Floren y los nervios de cortejar al más popular y exitoso de los entrenadores le delató cual quinceañera prepúber, haciendo las cosas a destiempo, mal y sin ningún miramiento, remordimiento ni madurez. Ni se esperó al desenlace de la final europea. Él tiró la caña, insistió y al final tuvo recompensa. Porque si esto ya era grave, más increíble es la reacción de Mou, O Especial, dejándose querer al principio, tonteando, zorreando vulgarmente dicho, para al final, y antes de convertirse en el nuevo campeón de Europa, decir que sí, que quiere entrenar a un grande de España -concretamente al Madrid-; porque le falta ganar la Liga BBVA (ya consiguió el Scudetto con el Inter y la Premier con el Chelsea) y la Champions con un club español (también conseguida en Calcio y en su día con el Oporto). Vamos, que con Floren, se unieron el hambre con las ganas de comer.

Insisto, no me parece mal. Incluso catalogaría de normal la no-celebración de Mou con su aún actual equipo, pasando de todo y yéndose del campo por la puerta de atrás. Él es así y hace estas cosas. Lo que ya me parece un poco de Juzgado de Guardia (por decir algo, en realidad me la pela un poco, hasta diría que todo esto puede llegar a divertirme como mera espectadora que soy) es la rueda de prensa de Don Pesetas diciendo que su intención es fichar a Mourinho, pero que aún no está la cosa cerrada, puesto que éste tiene que negociar con su todavía presidente Moratti una cláusula de rescisión (que todos menos el capo italiano pretenden pasarse por el forro de la huevera, qué tipos más listos) de unos 16 kilos, flecos a parte. Vamos, que se hace una rueda de prensa para destituir a Manuel (algo por todos sabido) y para decir que 'oye, que me apetece fichar a este tío, que lo sepáis'. Ah, vale. Aún no sé cómo en el turno de ruegos y preguntas no se levantó un periodista allí presente para decir, 'pues mire, yo le informo a ud. que le voy a tirar los trastos a mi vecina del 5º, que por cierto, está casada. No sé cómo reaccionará su marido, a lo mejor me parte la cara y hago el ridículo de mi vida, pero bueno, por probar...'. Todo muy patillero, muy cogido con pinzas. Por si no fuera suficiente, el punto álgido del encuentro periodístico -y lo que da título a esta entrada- es la vendida de moto de Floren en referencia al proyecto. Resulta que se intentará fichar a Mou por dar un impulso al proyecto. Ya. Y porque es el mejor, un tipo ganador (¡AHÁ!), que lo primero es ganar, no fascinar (¿?). Porque resulta que se busca la estabilidad del club, y la estabilidad viene ganando títulos. Bajo esta premisa, Floren debe ser más inestable que la salud mental de Raquel Mosquera.

Impulsar el proyecto. Vaya. Y la cosa no queda ahí. Lo que era un proyecto a largo plazo, donde no ganar nada en un año no era sinónimo de fracaso (¿?), porque se miraba hacia el futuro, ahora resulta que es un año de transición, de esos tontos donde te gastas 300 kilos, montas presentaciones multitudinarias, se publican portadas como esta, esta otra, o esta, o esta otra (por poner unos pocos ejemplos) y en general, se alardea de la vuelta del magnánimo Floren para gobernar la Galaxia (como Darth Vader). Pues eso. Que ya podría dejarse de milongas y reconocer a qué ha vuelto por estos lares: a ganar. A cualquier precio. No se busca un futuro, se busca un ahora, un resultado, títulos. Otra cosa es que, evidentemente, quiera que le dure más que la otra vez (en la cual tuvo que salir por patas), pero eso no es una planificación, es pura potra. Un equipo resultadista te dura lo que te dura, y no lo puedes sostener durante X años como sí puede hacerlo un proyecto de verdad. Así que nada, las cosas por su nombre, que tampoco pasa nada. Siendo como es, un Ser Superior, la afición sabrá perdonarle. Dios lo ha hecho peor (aquí estamos nosotros para atestiguarlo) y aún le quedan feligreses. O eso dicen. Yo es que no suelo pasarme por su sede social...

15-5-2009

27-5-2010

Por el momento, eso parece ser todo.